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(CNN Español) — El actual presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, con una década en el poder, mencionó este lunes que aún no tiene certeza si será el candidato presidencial por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) para las elecciones de 2024.
“Lo que puedo decirte es que es demasiado temprano aún. Apenas iniciamos el año. Únicamente Dios sabe. No Diosdado, Dios. Esperemos que se definan los escenarios electorales del proceso que va a suceder este año, y estoy seguro de que, con la bendición de Dios, tomaremos la mejor elección”, expresó el líder durante su entrevista anual para empezar el año nuevo con el periodista Ignacio Ramonet.
Aún sin definir su posición como el candidato del chavismo, Maduro advirtió que en 2024 “el pueblo de Venezuela le dará una nueva lección a los imperios del mundo, a la derecha oligárquica, a los extremistas, que no olvidarán durante décadas” y que el país se prepara para una “gran victoria electoral”.
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También mencionó que llegó a la presidencia “porque al comandante Chávez, en un momento dado, le tocó, por una enfermedad muy grave, tomar una decisión” y rechazó que sea debido a egos personales.
“En esta elección sobre mi eventual candidatura en 2024, nunca estará por delante ni las ambiciones personales, ni individualistas, ni ego ni sangre azul, estarán los intereses de la patria. Y cuando se tome la decisión, sea la que sea, saldremos todos a conquistar”, detalló.
En octubre de 2023, la Comisión Nacional de Primaria de Venezuela (CNP) proclamó a María Corina Machado como la vencedora de las primarias opositoras hacia las elecciones previstas para 2024.
Machado está inhabilitada por una medida impuesta por la Contraloría General de Venezuela por supuestamente no incluir en su declaración jurada de patrimonio el pago de bonos de alimentación. La dirigente opositora insiste en que la inhabilitación es ilegal.
A mediados de diciembre, Machado acudió al Poder Judicial de Venezuela para pedir la revisión de su invalidación política.
“Voy a realizar todo lo que sea necesario, nosotros vamos a llegar hasta el final. La pelota está ahora en la cancha del régimen, ahora es a ellos los que les toca a ellos cumplir”, enfatizó la líder opositora. Sin embargo, aún no se emite respuesta sobre su inhabilitación.
La oposición y el Gobierno de Maduro sellaron un pacto en Barbados a mediados de octubre, que levanta por seis meses algunas sanciones económicas a Venezuela impuestas por Washington que permitirían a Caracas, por ejemplo, volver a vender petróleo a Estados Unidos, a cambio, entre otras cosas, de que el Ejecutivo venezolano respete los derechos políticos de sus adversarios.
En octubre, Estados Unidos advirtió que “tomará medidas” si el Ejecutivo de Maduro no cumple con la ruta política marcada en los acuerdos en Barbados.
Entre las condiciones establecidas para que avance el proceso de negociación con respecto a las sanciones comerciales está garantizar elecciones transparentes.
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